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| Salinas saluda a sus pares priistas en Chetumal (Foto: aristeguinoticias.com) |
Mientras Ernesto Zedillo consigue la inmunidad diplomática, su antecesor y adversario, Carlos Salinas de Gortari, aparecía feliz y sin reservas en un evento en Chetumal el 7 de septiembre del 2012. En el regreso del PRI, las redes de apoyo a Peña Nieto afloran a plena luz del día.
En el informe de labores del gobernador Borge, un invitado de honor se robó todas las cámaras. El innombrable ya no escapa de los reflectores púbicos. Muy al contrario. El ex presidente Carlos Salinas de Gortari reapareció feliz y sin reservas en el evento público de los priistas de Quintana Roo y lo menos que puede decirse es que está de excelente humor:
Que viva la familia, exclamó el ex presidente Carlos Salinas de Gortari entre apretones de mano y abrazos intensos de los gobernadores del PRI que acudieron a esta ciudad para el primer informe de labores del mandatario de esta entidad, Roberto Borge Martín.
—México ya tiene presidente electo, ¿está feliz?
—¿No se me nota?
—¿Cómo se siente?
—Voy a tener que hacerme cirugía plástica para quitarme la sonrisa.
—¿Está feliz?
—¿No ve la sonrisa?
Ya en entrevista con todos los representantes de los medios de comunicación, el ex presidente de México dijo estar seguro de que Enrique Peña Nieto “sabrá estar a la altura de la enorme responsabilidad que va a tener”.
Y del IFE y del Tribunal Electoral, sostuvo que “respondieron y cumplieron con su responsabilidad y en ese sentido el país tiene camino cierto”.
El mismo viernes 7 de septiembre en la fiesta del PRI, Salinas abrazó sin recato al heredero de la franquicia electoral del Partido Verde Ecologista, Jorge Emilio González Martínez. Y se sentó al lado de Pedro Joaquín Coldwell para que todo el mundo entendiera que la dirección del tricolor ya no reniega ni se esconde de los héroes que formaron el partido tal cual es hoy en día.
Y desde el centro burocrático de QR, Chetumal, dijo Salinas de Gortari vivir en el gozo de la reflexión , o “la batalla de las ideas” aunque tiene claro que con Peña Nieto llega “la esperanza”. Sin recato alguno, las poderes reales del priismo mueven sus cartas a plena luz del día.
Habrá más sorpresas. Atado y bien atado el camino a Los Pinos, nada es ya tabú. Incluida la familia Salinas donde hasta el eterno hermano incómodo, Raúl, habla por los codos.
Nuevos tiempos, viejas caras.
En el informe de labores del gobernador Borge, un invitado de honor se robó todas las cámaras. El innombrable ya no escapa de los reflectores púbicos. Muy al contrario. El ex presidente Carlos Salinas de Gortari reapareció feliz y sin reservas en el evento público de los priistas de Quintana Roo y lo menos que puede decirse es que está de excelente humor:
Que viva la familia, exclamó el ex presidente Carlos Salinas de Gortari entre apretones de mano y abrazos intensos de los gobernadores del PRI que acudieron a esta ciudad para el primer informe de labores del mandatario de esta entidad, Roberto Borge Martín.
—México ya tiene presidente electo, ¿está feliz?
—¿No se me nota?
—¿Cómo se siente?
—Voy a tener que hacerme cirugía plástica para quitarme la sonrisa.
—¿Está feliz?
—¿No ve la sonrisa?
Ya en entrevista con todos los representantes de los medios de comunicación, el ex presidente de México dijo estar seguro de que Enrique Peña Nieto “sabrá estar a la altura de la enorme responsabilidad que va a tener”.
Y del IFE y del Tribunal Electoral, sostuvo que “respondieron y cumplieron con su responsabilidad y en ese sentido el país tiene camino cierto”.
El mismo viernes 7 de septiembre en la fiesta del PRI, Salinas abrazó sin recato al heredero de la franquicia electoral del Partido Verde Ecologista, Jorge Emilio González Martínez. Y se sentó al lado de Pedro Joaquín Coldwell para que todo el mundo entendiera que la dirección del tricolor ya no reniega ni se esconde de los héroes que formaron el partido tal cual es hoy en día.
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| Abrazos coludidos: Salinas y el niño verde (Foto: expedientenoticias.com) |
Y desde el centro burocrático de QR, Chetumal, dijo Salinas de Gortari vivir en el gozo de la reflexión , o “la batalla de las ideas” aunque tiene claro que con Peña Nieto llega “la esperanza”. Sin recato alguno, las poderes reales del priismo mueven sus cartas a plena luz del día.
Habrá más sorpresas. Atado y bien atado el camino a Los Pinos, nada es ya tabú. Incluida la familia Salinas donde hasta el eterno hermano incómodo, Raúl, habla por los codos.
Nuevos tiempos, viejas caras.
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